Que hay de las voces fantasmagoricas captadas en cintas magnetofónicas.

El poder de la sugestión.

¿has visto a los investigadores paranormales usar cintas de audio para captar voces de ultratumba?, ¿no te extrañas de por qué las voces captadas en la cinta solo se oyen al reproducirla?, ¿por qué no se oyen en tiempo real?, ¿por qué los fantasmas no pegan un buen grito fuerte y claro para que todos los oigan?, ¿son esas voces del más allá o del menos aquí?, ¿son almas atrapadas o mera sugestión?,
te has dado cuenta que cuando alguien del grupo dice haber oído algo, inmediatamente todos lo oyen?, y por qué no lo habían oído antes ?.
Pues te sorprenderás cuando conozcas la verdad sobre este fenómeno.

Quiero que hagas este excelente ejercicio para que sepas de una buena ves si esas voces son de almas en pena o es simplemente que escuchamos lo que nos dicen que escuchen.

Este vídeo se trata de supuestos mensajes en español que los cantantes norteamericanos agregan a sus canciones. (son solo coincidencia)

primero que todo, cierra tus ojos y escucha los fragmentos de la canciones sin ver la pantalla, escucha muy bien y trata de captar palabras o frases en español en cada pedazo de canción en ingles, repite el video unas diez veces si quieres y trata de captar palabras o frases en español:

Luego de haber escuchado el video varias veces sin verlo, escúchalo nuevamente (viéndolo) estando atento a las frases y palabras escritas en el video; te preguntarás ¿ como no pude oir eso antes ?



Como puedes ver todo es sugestión, hasta que no nos dicen que oír, no escuchamos nada.
Todo está en nuestro cerebro y no en el otro mundo. Este mismo fenómeno de ilusión también ocurre a nivel visual, muchos ven rostros de familiares muertos y espíritus atrapados en una simple fotografía defectuosa. En mi barrio se apareció la virgen María en una pared y más de un tonto se arrodilló a rezar, y resulto ser la humedad producida por un escape de agua; en otra ocasión el rostro de Cristo se apareció en una pared que estaba siendo pintada, hasta el sacerdote tuvo que venir a ver ante las suplicas de los creyentes y cuando se echó la otra mano de pintura, simplemente desapareció.